Alguno de mis placeres:
Leer.
La amistad, aunque reconozco que me tira mas tenerla con mujeres. Podria ser por aquello de que "la amistad entra hombre y mujer es el amor visto de perfil", aunque yo creo que es por afinidad.
Abrazar. La calidez de un abrazo largo, incrustandote en el otro, entregando todo el cuerpo... es insustituible.
Viajar. A nuevas ciudades que te enriquecen con sus diferencias, belleza y acogida. Tambien con la mente a lugares imposibles, prohibidos, inadecuados.
El cine.
Acariciar y que me acaricien, aunque estoy en una epoca que me gusta mas hacer que que me hagan.
Internet, con todas esas posibilidades. Desde ser mi nueva enciclopedia, hasta la capacidad de comunicacion sin prejuicios que ofrece.
La musica, una de las mejores y mas desinteresadas acompañantes que he conocido.
Las conversaciones que empiezan siendo palabras y acaban calidas y sin hora.
Tengo unos cuantos placeres más, pero para una primera impresion parece suficiente.
¿Quieres contarme alguno de los tuyos?
4 comentarios:
Luka, te devuelvo tu amable visita y me encuentro con un rotundo inicio de algo que promete con mayúsculas... Placeres, y de los buenos.
Como también te ocurre a ti, te diré que uno de mis placeres que no nombras es disfrutar del sentido del humor (ya me entiendes: Arévalo queda descartado de esa categoría). También reír. Sonreír, casi siempre. Fluir, en definitiva, viendo las cosas amables de la vida. Siempre y cuando me sea posible por las borrascas del momento.
Espero impaciente la siguiente entrada. Un abrazo!
Susana: Para siempre te quedara el titulo de la mujer que me ha desvirgado (el blog, claro).
Siempre he pensado que para saber si alguien tiene sentido del humor hay que averiguar si sabe reirse de si mismo.
¿Tienes borrascas cercanas? o solo son esos cabreos que intuyo leyendote.
Si, la intencion es hablar de lo que produce placer, de lo que hhace sonreir. De lo que se quiere repetir.
La risa que siguió a tu comentario sobre el desvirgamiento me "atacó" inesperadamente cerca de las 2 am (mientras miraba plácidamente cosas en youtube). O sea que sí: andábamos los dos insomnes. Mientras no haya que madrugar al día siguiente, no me importa gran cosa. Pero el insomnio llega también los domingos, y los lunes, y algunos martes... Qué fiel acompañante éste!!
Pues alguna borrasquilla acostumbra a andar no muy lejana, por regla general. Y hay veces (supongo que nos pasa a todos) que de pronto te parece que se convirtió en un gran huracán. Pero en fin, a pesar de ello, hay que tratar de mantener el buen humor y sobre todo, como tú dices, el que hace nos riamos de nosotros mismos y de nuestra miopía para distinguir tamaños de borrascas.
A un blog que nace con esa sanísima intención y que además está tan bien escrito, poco más se le puede pedir, ¿no?
Un abrazo!!
(P.D. ¿Te has planteado ponerte un contador? Quizás te lleves una sorpresa y me quites la etiqueta de 'desvirgadora' oficial, una vez te asegure que no he sido yo la de las 237 entradas...)
Susana: Hacerte reir a las dos de la madrugada me parece un logro de grandes dimensiones.
yo transcurro habitualmente hasta las dos, y si hay algo interesante hasta que haga falta.
Luego suelo levantarme bien. Nunca abandono algo placentero pensando en las consecuencias...pero claro el insomnio es otra cosa.
No siempre va acompañado de momentos de placer.
Las borrasquillas aparecen, y ya he aprendido a catalogarlas. Las de poca intensidad las arrincono ya que el tiempo las pone en su lugar. Las intensas las relativizo, suelo decirme: Peor seria que Ansar ganara otra vez unas elecciones.
Ya que me lo dices, me pondre el contador; pero te aviso tu deberas encargarte de cuidar mis depresiones cuando no marche.
Aunque mi intencion no es tener muchos visitantes. Pocos y que aporten.
No quiero los que dejan la "meadita" y te invitan a su blog.
Creo que diez/doce seria el numero que podria atender con mi amabilidad famosa en el mundo mundial.
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