lunes, 31 de agosto de 2009

personal


Estaba sentado en la terraza de mi café preferido, bebiendo una copa de vino blanco frío, mirando el repetitivo movimiento de las olas.
Los demás del grupo hablaban sobre las cotidianidades de la semana y sobre el principio de la temporada de trabajo.
Sonaba una dulce balada cantada por una de las voces femeninas que me encandilan.
Ella venia del agua, radiante, con ese ritmo tan especial que tiene al caminar (si la conociera George Harrison le habría dedicado "Something") sonriendo al grupo al llegar a nuestra altura. "¿Habéis pedido también para mi?" preguntó mientras buscaba su toalla.
Al pasar por detrás mía rozó con su mano mi nuca, despeinándome un poco.
Fue una comida agradable y exquisita de final de verano.
Por la noche, ya en casa, solo recordaba ese glorioso roce, ese decirme sin palabras, esa personalizacion entre un grupo.

sábado, 29 de agosto de 2009

un largo café

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Nos conocíamos de internet, nos habíamos mandado fotos y poco mas.


Por trabajo tenia que desplazarme a su ciudad, después de muchísimas dudas (no quería molestar) me atreví a proponerle tomar un café. Para mi agradable sorpresa, aceptó.

Nos encontramos justo después de comer, nos sonreímos, nos abrazamos y empezamos una charla que salia fácil. En un momento determinado pedimos la cena y luego nos invitaron a abandonar el lugar porque cerraban.


Hablamos -sin reloj- como si nos conociéramos de toda la vida. Solo paramos de sonreír para carcajearnos.


Eso fue un placer.




jueves, 27 de agosto de 2009

empezamos

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Alguno de mis placeres:

Leer.

La amistad, aunque reconozco que me tira mas tenerla con mujeres. Podria ser por aquello de que "la amistad entra hombre y mujer es el amor visto de perfil", aunque yo creo que es por afinidad.

Abrazar. La calidez de un abrazo largo, incrustandote en el otro, entregando todo el cuerpo... es insustituible.

Viajar. A nuevas ciudades que te enriquecen con sus diferencias, belleza y acogida. Tambien con la mente a lugares imposibles, prohibidos, inadecuados.

El cine.

Acariciar y que me acaricien, aunque estoy en una epoca que me gusta mas hacer que que me hagan.

Internet, con todas esas posibilidades. Desde ser mi nueva enciclopedia, hasta la capacidad de comunicacion sin prejuicios que ofrece.

La musica, una de las mejores y mas desinteresadas acompañantes que he conocido.

Las conversaciones que empiezan siendo palabras y acaban calidas y sin hora.

Tengo unos cuantos placeres más, pero para una primera impresion parece suficiente.

¿Quieres contarme alguno de los tuyos?